sábado, 27 de febrero de 2010

Un ritmo con raices negras

Teatro del ritmo, pasó por nuestro programa y nos dejó sus canciones y la cultura afroperuana.



Primera parte



Segunda parte


www.casaescuelateatrodelritmo.blogspot.com/2009/07/encuentro-del-reencuentro-es-un-evento.html

lunes, 8 de febrero de 2010

La duda


Por Benita Cuellar

Cotidianamente decimos "tengo una duda", hacemos o decimos tal cosa "por las dudas", "dudo de tal o cual persona", "dudo que vaya a suceder esto", "tengo tantas dudas", continuamente estamos albergandola y recurrimos a ella en circunstancias que nos pueden parecer amenazantes o gratificantes.
La duda se expresa como un vaticinio sobre el futuro, aunque dure unos segundos. Está presente frente las decisiones importantes que tenemos que tomar, sean dificiles o felices. Gozamos cuando dudar fue la mejor elección y nos sentimos muy mal cuando dudar no fue lo correcto.
Desde el vientre materno, ya venimos gestando dudas: "¿será varón?", "¿será mujer?" Y el periplo de ella durará durante las distintas etapas de nuestra vida. Así, en la niñez, andamos persiguiendo y poniendo nerviosos a nuestros padres con dudas como: "De donde venimos nosotros?", "¿nacimos de un repollo, o nos trajo una cigüeña?", "¿que es esa cosa que cuelga de papá?", y qué quiere decir esto o aquello, qué es eso? y por qué tal cosa? etc, etc.
Cuando pisamos la adolescencia el mundo se nos hace gigante y cuál Quijote de la Mancha, pensamos que tenemos que salvar las causas que las dudas las perdieron. Y a veces la duda gana y otras podemos con ella. Dudas sobre el amor: "¿que es el amor?", "alguien gustará de mí","me quiere o no me quiere"; dudas religiosas: ¿existirá Dios? ¿Cómo hizo para crear al mundo en 7 días? ¿Será parecido a mí?", porque dicen que somos a su imagen y semejanza; dudas existenciales: "¿que haré con mi vida?", en fin, dudas de todo tipo y colores.
Luego, cuando somos más grandes y nos convertimos en padres las dudas son más serias de lo que pensamos, "¿estaré siendo buen padre?", "habré elegido la mujer correcta", "el país seguirá igual dentro de unos años", "me quedo o me voy." Las dudas son parte de nuestra vida, andamos con ellas. Hay dudas que duran unos instantes, otras un tiempo más largo y otras que son para siempre. Dudas que no tienen la respuesta en esta vida, como las de la vejez ¿que hay después de la muerte?, ¿me recordarán como un alguien piola, o cascarrabias?, ¿habré hecho algo por este mundo?
Entonces, nos pasamos la vida dudando, de nosotros, de los demás y de lo que nos rodea. De lo que conocemos y lo que no conocemos.
¿Que sería de nosotros sin la duda?, es una duda.